No sé si te pasa lo mismo, pero si tenés entre 40 y 50 años, probablemente lo primero que pienses de Plastic Man es en esa serie animada del '79 que por estos lares se transmitió a mediados de los '80. "A la Fuga" es el primer comic que leo teniendo como protagonista principal al elástico personaje, y sin dudas esta obra de Kyle Baker mantiene ese espíritu ochentero (aggiornado, claro está), con humor sencillo y disparatado, basado muchas veces más en las situaciones que en un punchline. un tono visual cartoonesco y absurdo, y una narrativa muy ágil.
Plastic Man es "Anguila" O'Brian, un ex-gangster que habiendo caído en un tanque de acido, obtuvo sus poderes de elasticidad. Luego de recuperarse en un santuario llamado "Remanso Paraíso", "Anguila" - consciente de esta segunda oportunidad que se le estaba dando - decide utilizar sus poderes para el bien, trabajando por su cuenta, para la Liga de la Justicia, o para el FBI. Plastic Man - así como lo hicieran Batman, Flecha Verde, o Flash - tiene su fiel acompañante, un ser bastante corto de entendederas llamado Woozy Winks. El dúo - en gran, gran parte gracias a la suerte - ha tenido bastante éxito en su lucha contra el crimen. En "A la fuga", Plastic Man tendrá un nuevo desafío: que no se descubra su pasado como criminal y detener al villano que está tratando de exponerle e incriminarlo en el asesinato de otro gangster, haciéndolo ver como un ajuste de cuentas. Plastic Man se postula ante el director del FBI para ser quien dé con "Anguila" para poder mantener su propio pasado oculto. Sin embargo, esto se tornará más difícil cuando desde otra ciudad llegue una nueva compañera para O'Brian que se muestra resoluta e inflexible en su misión de averigüar quien es realmente "Anguila" O'Brian.
Kyle Baker se hizo cargo de Plastic Man desde el 2004 al 2006, y ello le valió 5 premios Eisner (máximo galardón para un historietista), y un premio Harvey (pretigioso premio otorgado por la industria norteamericana) como Mejor Serie Nueva. Baker logra un tributo perfecto a Jack Cole, creador del héroe, en este "A la fuga". Un Cole que en su momento imaginó al héroe como desenfadado e histriónico, convirtiéndose en un éxito automático, allá por 1941 cuando saliera en las páginas de "Police Comics". La propia idiosincracia de Cole y Plastic Man le permitieron al artista en su momento experimentar y romper barreras antes vistas en el mundo de las historietas, ya sea en los textos o en los dibujos. Plastic Man, siendo un personaje que está totalmente chiflado, casi indestructible, y con poderes que le permiten adoptar cualquier forma posible (solamente limitado a mantener sus colores - rojo, amarillo, negro, y piel), se encuentra únicamente limitado por la imaginación de quien lo dibuja o lo escribe. A sabiendas de ello, es que Baker - así como lo hiciera Cole - nos lleva por un sinnúmero de situaciones que solo podrían ocurrir con "Plástico" como héroe.
Si jamás te has cruzado con un comic y ni has oído hablar de Plastic Man, pero te atraen cartoons al estilo "Merry Melodies" o "Looney Toons", este será sin dudas un buen bocado; uno que se degusta rápido, y que deja un buen sabor de boca.
